La Colegiata de Santa María la Mayor de Bolea (Huesca) fue construida entre los años
1541 y
1559. Para su edificación se aprovecharon los restos de un templo anterior de origen románico situado en el mismo lugar. El maestro de obras fue
Pedro de Irazábal, de origen vasco. Los elementos arquitectónicos que la forman en su mayor parte corresponden al
Gótico y al
Renacimiento.
El retablo mayor es una obra maestra de comienzos del Renacimiento. Fue realizado posiblemente entre los años 1499 y 1503. Consta de veinte tablas pintadas al temple y cincuenta y siete tallas de madera policromada. Las tallas y la estructura del retablo son obra del maestro flamenco Gil de Brabante, y la pintura se debe al MAESTRO DEL RETABLO DE BOLEA, pintor anónimo, cuyos rasgos estilísticos muestran las influencias flamenca e italiana.
La Colegiata de Bolea fue declarada Monumento Histórico-Artístico de carácter nacional (BIC) el 23 de febrero de 1983. Es la Iglesia parroquial de Bolea y forma parte del Patrimonio de la Diócesis de Huesca.
Su mantenimiento, tutela y difusión turística y cultural corre a cargo de la Asociación de Amigos de la Colegiata de Bolea, entidad sin ánimo de lucro, creada por iniciativa popular en el año 1991 y que cuenta con 440 asociados.